lunes, 29 de octubre de 2007

LA MALA EDUCACIÓN


No somos más tontos porque no nos dejan.

Reconozco que no he leído el libro de texto “Educación para la Ciudadanía” pero me atrevo a resumir su contenido:

“Todos somos iguales. Vive y deja vivir cabroncete intolerante.”

Pues nada, 12.987 horas de debate semanales, enfrentamientos políticos a cara de perro, manifestaciones sociales, crispación, amenazas, “pues mi hija no va a ir a esa clase”, “yo prefiero la clase de religión”, “estamos perdiendo los valores”, “¡la sociedad se rompe!”, etc…. El Rock n’roll de todos los días…

No somos más hipócritas porque está prohibido (o debería estarlo).

La televisión es la asignatura reina en España. Todos los jóvenes y niños la estudian a diario durante más de tres horas, con repaso incluido. Somos puntuales a su cita. No interrumpimos cuando está hablando. Nunca le perdemos el respeto. Si tenemos que ir al baño, aguantamos como jabatos hasta el cambio de programa o anuncios. (Con una pausa de 15 segundos nos apañamos de sobra). Y para colmo, el día siguiente repasamos la lección con los amigos, contrastando opiniones y puntos de vista.

Temario de la asignatura “Educa Tv” para el curso 2007-2008:
(Suena de fondo “Imagine” de Lennon)

- Igualdad entre hombres y mujeres. (Escenas de Matrimonio. L-V 21:30 h. en Telecinco)

- Respeto, tolerancia, solidaridad, justicia, igualdad, ayuda mutua, cooperación y cultura de paz. (Aquí hay Tomate. L-V 15:30 h. en Telecinco)

- Identificación y rechazo de situaciones de marginación, discriminación e injusticia social. (Profesorado: Javier Sardá, Alfonso Arús, Santiago Segura, Javier Cárdenas, Santiago Acosta, Pepe Navarro)

- Vivir en sociedad. Normas y principios de convivencia. (Gran Hermano. Jueves a las 22:00 en Telecinco)

- Entrenamiento en el diálogo y el debate (Donde estás Corazón. Viernes a las 22:00 en Antena 3)


¿A quien debemos felicitar por este educador temario?
¿Quién nos distrae del peligro de la televisión y nos traslada al de los libros de texto? ¿Por qué?
¿Dónde está el límite entre la libertad de expresión y el derecho a la educación? ¿A cual da menos miedo atacar?

¡Cuate, aquí hay tomate!

martes, 23 de octubre de 2007

VOLVEMOS EN 15 SEGUNDOS


“Estoy viendo la televisión y siento una necesidad imperiosa de ir al baño” (Godot, 2007).

Necesito unos anuncios.

¿Cuanto tiempo me darán ahora? ¿20 segundos?, ¿4 minutos?, ¿30 segundos? Que sea el largo por favor…

¡Mierda! ¡15 segundos!

Salgo corriendo del salón, enfilo el pasillo lo más rápido que puedo, derrapo a la altura del baño, me caigo, entro y consigo triunfar en menos de 10 segundos. Salgo del baño y decido jugármela: vuelvo a la cocina a por un vaso de Coca Cola. Realizo un sprint espectacular hasta el sofá del salón, al que me tiro de cabeza en un impecable y arriesgado salto.

*****

Ya ha comenzado el programa… Me he dejado todas las luces dadas, la coca cola está sin hielos, creo que me he hecho un esguince y además no sé si he tirado de la cadena…

Hace tiempo, cuando empezaban los anuncios, se nos activaba una especie de reloj interno casi perfecto. Podías hacer de todo sin ninguna prisa y con un margen de más o menos 2 minutos, clavabas tu vuelta al salón, haciéndola coincidir exactamente con el final de los anuncios.

Ahora es imposible. La lucha encarnizada de las cadenas de televisión por tenernos quietecitos, evitando el zapping, ha conseguido que la gente cene en 4:30, haga sus necesiadades en 0:20 y tienda la ropa en 01:45. ¿Qué va a ser lo próximo? ¿Descargas eléctricas a través del mando cada vez que amaguemos un cambio de canal?

Estos malos hábitos pasan factura. En Madrid estamos sufriendo un brote espectacular de Gastroenteritis. En un principio, asocié este hecho a la emisión del programa “La Noria” los sábados por la noche, pero más tarde intuí que podía tener algo que ver con los nuevos hábitos acelerados de la publicidad en España. (Hay que lavarse las manos SIEMPRE después de ir al baño).

Menos mal que nos queda Coronado, (record Guinnes en ingesta de Bifidus Activo) que nos aconseja de forma altruista como llevar una vida estomacal sana gracias a sus yogures de 1.321 sabores (a miércoles 24 de Octubre del 2007).
Quien le habrá dado permiso a este tío para que delante de toda mi familia se ponga a hablar de mi reloj analógico y mis visitas al baño. Su mensaje es claro y violento:

- “¡Iros a cagar!”

Ahora debería matizar:

- “¡Iros a cagar!, ¡solo os quedan 13 segundos!”

martes, 16 de octubre de 2007

UNA SERIE Y DOS DE BRAVAS


Uno de los iconos más representativos del sentimiento español es el toro de Osborne. Representa o pretende representar el carácter y temperamento español; Fuerza, elegancia, vigor, grandeza y demás chorradas… Apoyo retirar, con carácter de urgencia, esta publicidad engañosa y sustituirla por otra mucho más representativa: la cabra.
Hace unos días paseaba por la Castellana más salerosa que un greatest hits de Joselito, acompañando al destacamento con más huevos del ejército español, la Legión.
Pues eso, fuera máscaras: Al españolito medio le pirran las series nacionales, el bocata de chorizo y el fútbol de los domingos.

Las pocas veces que hemos intentado emular a las series americanas, la hemos cagado y además, haciendo el ridículo (“RIS” vs “CSI”, un buen ejemplo de ello). Ya lo decía Alfredo Landa: “En España se hacen españoladas”. ¿O acaso deberíamos hacer hungaradas? Yo estoy de acuerdo. Pero, ¿no podríamos alcanzar un término medio en nuestras series de ficción? Es decir, entre “Manos a la obra” y la serie americana “Lost” (“Perdidos”) hay un margen bastante amplio por explorar, ¿no?

Hasta hace poco, solía bajarme de forma compulsiva las temporadas de “Perdidos” cuando todavía no se habían estrenado en España. ¿Conocéis a alguien que se haya descargado de Internet la segunda temporada de “Aida”? Yo tampoco. Pero el caso es que series como “Escenas de matrimonio” están consiguiendo unos picos de audiencia espectaculares, a la vez que preocupantes. 5.592.000 seguidores y el 31% de cuota de pantalla el pasado lunes. Me niego a creer que la gente se ría con esa serie. En mi primer visionado, tuve que quitarla porque en una conversación de menos de medio minuto me habían lanzado exactamente 32 bromas seguidas. Tanto guiño cómico acabó con mi paciencia. Si tenéis buena memoria, comprobaréis que muchísimas de las escenitas de matrimonio están directamente exportadas del maravilloso programa “Noche de Fiesta” del morenín. Es, sin duda, el “copy-paste” más rentable de la televisión.

Cuando veo una serie americana, procuro crear un ambiente relajado. Bajo persianas, apago luces y como mucho, me pongo una copa. Evidentemente, cuando veo “Aida” puedo estar perfectamente comiendo una pizza, recogiendo el cuarto, escribiendo un mail o hablando por teléfono mientras me rasco los huevos. ¡Porque no es lo mismo!

Pedir a las series españolas menos chándal, cañas y sexo es como pedir a los americanos que no hagan comparaciones constantes en sus documentales. No sé si os habéis dado cuenta pero a los americanos les encanta comparar. Cuando quieren explicar, por ejemplo, el tamaño de una central petrolífera del golfo pérsico, enseguida recurren a simbolismos como: “es como 50.000 camiones colocados uno encima del otro”.
O cuando quieren hablar de una explosión, se apresuran a matizar: “es como si 300.000 huevos duros fueran lanzados a tu cara con la fuerza de un F-18 justo antes de despegar”. Como que se quedan más tranquilillos diciéndolo. Os invito a comprobarlo en los documentales que emite La Sexta los sábados y domingos a primera hora.

Volviendo al tema, España es diferente. Siempre lo ha sido. Pero en España existe gente que hace cosas diferentes de verdad. “El Orfanato” o “El penalti más largo del mundo”, “Callejeros” o “España Directo”, “Javier Bardem o Javivi”.
Ser o no querer ser, esa es la cuestión.

“Escenas de matrimonio”
Cada noche en Tele 5
A partir de las 21:30

sábado, 13 de octubre de 2007

LABORABLES Y FESTIVOS


Debería ser obligatorio salir los viernes. Los sábados doy por hecho que también. Si lo pensamos bien, debía ser de obligado cumplimiento salir los 7 días de la semana.
Desde mi punto de vista, hay dos tipos de personas: Los laborables y los Festivos.

Los Laborables.
Se caracterizan por acostarse todos los días con su jefe. Se pasan el día pensando en su superior, cuestionándose si lo están haciendo bien o lo están haciendo mal. Este enamoramiento desviado suele ser el menos correspondido del mundo, ya que normalmente el jefe está a otras cosas y nunca se entera del amor que le profesa el laborable.
Se caracterizan por ser los primeros en retirarse los jueves, con la excusa de tener que levantarse temprano para trabajar o con la excusa de tener que hacer maletas. Cuando quedan con amigos, se pasan más del 70% del tiempo hablando de su trabajo, siempre lleno de problemas, siempre lleno de desesperación. A veces rozan lo íntimo en sus declaraciones. Suelen empezar sus charlas con frases tipo “vaya semanita he tenido”.Y si os esforzáis y hacéis memoria, os daréis cuenta que siempre, absolutamente siempre, tienen “semanitas”. Viven en un sin vivir pero les da igual. En el fondo les encanta; es más que un sentimiento, es una actitud. Son muy tranquilos y los viernes tienen por obligatorio estar destrozados (sea verdad o no). Alquilan películas sin parar y además lo cuentan. Se esfuerzan de lunes a viernes con madrugones de 06:30 y los fines de semana, justo cuando empieza lo importante, cuando hay que darlo todo con los más cercanos, sacan la bandera blanca y se van a casa, previo paso por el videoclub.
Resumiendo: Viven lo laboral y descuidan lo personal. Prefieren una sonrisita del jefe a una noche de copas con amigos.

Los Festivos.
Se caracterizan por pensar que “las mañanas son esas horas del día que no sirven para nada”. (Tegu).
Siempre están de buen humor. Salen siempre que alguien se lo propone y son muy fáciles de liar una noche de lunes. No estoy hablando de ricos. Ellos sueñan con ser ricos. Hablo de gente normal que trabaja de lunes a viernes pero que también sale de lunes a viernes.
Tienen mentalidad ganadora. Si están cansados, saben que a la segunda copa se les pasa. Cuando salen a cenar, nunca miran el precio de los platos y además siempre acaban con copa, nunca con licor de manzana. Son mucho más alegres que los laborables porque viven mucho más que ellos. Les pasan miles de cosas durante la semana. Y las mejores, siempre a partir de las 19:00 de la tarde. Nunca te preguntarán “que tal en el curro” porque en el fondo saben que no es importante.


Yo, me esfuerzo en ser festivo. Pero ayer viernes, me quedé en casa viendo la tele.
Los callejeros de Cuatro, viéndome triste y abatido me sacaron de casa y me dieron un paseo por la Gran Vía de Madrid. La pateamos entera de arriba abajo. Me enseñaron la realidad de la forma más cruda, sencilla y cercana que os podáis imaginar. Me presentaron a muchísima gente con la que nuca me habría parado ni a hablar. Sabía que estaban ahí, pero nunca había pensado en ellos. Sobre las 4 de la madrugada comimos tallarines de los chinos ambulantes de Gran Vía y bebimos cervezas frías.
El próximo viernes saldré seguro. Pero si no es así, quedaré de nuevo con los callejeros de Cuatro. Gracias a ellos, la realidad tiene cabida en la televisión. Muchas gracias y enhorabuena por el pedazo programa que hacéis!

jueves, 11 de octubre de 2007

ASCO DE NORIA


Vivimos en la sociedad de la información y la imagen. Muchos de nuestros padres y abuelos siguen prefiriendo la radio y los periódicos a la televisión. Pero nosotros, los que rondamos los 30 años, nos hemos educado en la imagen.


¿Quieres que me crea algo? Enséñamelo.


Nos hemos convertido en auténticos expertos de la imagen. Aparte de la inteligencia emocional, la numérica, la musical, la lingüística y la espacial hemos desarrollado otra nueva inteligencia que es la audiovisual. Igual no sabemos hacer una raíz cuadrada pero como nos pregunten quién está saliendo con Inés Sastre, quién ha sido el último expulsado de GH o a qué hora se emite “House” contestamos casi sin pensar. Por tanto, podemos afirmar que el poder de la televisión sobre la sociedad es inmenso. Este poder puede ser utilizado de forma positiva si lo que se transmite son valores y mensajes constructivos y educativos para la gente. Pero a la vez, puede ser muy peligroso y destructivo si se utiliza para fines diferentes al servicio público (como suele ocurrir). Muy a menudo, se utiliza para tenernos donde quieren tenernos pensando lo que quieren que pensemos y haciendo lo que quieren que hagamos.


Lo que no vemos, simplemente no existe.


A modo de ejemplo, podemos hablar de las fotos del Rey. ¿Acaso nunca se habían quemado fotos del Rey en España? También podemos hablar de los perros catalogados como peligrosos. ¿Acaso no atacaban antes? O también de la trágica muerte de Antonio Puerta. ¿Acaso no han muerto deportistas de élite en situaciones idénticas a las del jugador sevillista?


Por supuesto que sí. Lo que diferencia estos casos y los lanza a debate nacional es el simple hecho de haber sido grabados y emitidos por televisión. Los hemos visto. Hasta hace poco, una imagen valía más que mil palabras. Ahora, una imagen es lo único que vale. ¿Cuántos conflictos bélicos azotan al mundo actualmente?: Angola, Burundi, Congo, Etiopía, Ruanda, Sierra Leona, Birmania, Sri Lanka, Sudán, Colombia o Guinea son algún ejemplo de ello. Obviamente, la inmensa mayoría de la gente te hablará de dos: Irak y Afganistán. Los de la tele, claro….


Esta introducción pretende dejar claro las enormes posibilidades de este gran medio que es la televisión. Dependiendo de su uso puede ser enormemente enriquecedor pero a su vez, puede tornarse destructor. El mejor ejemplo: “La Noria”


Odio los comentarios tipo: “Si este programa tiene tanto éxito es porque la gente lo demanda”. “La televisión es el reflejo de la sociedad”, etc…


Y una mierda. ¿Alguien nos ha preguntado si queríamos ver el sábado pasado el espectáculo dantesco que dio “La Noria” a propósito del caso Puerta?


La carrera por conseguir el mejor share está convirtiendo los contenidos de algunos programas en algo casi delictivo.


Jordi Gonzalez a la cabeza, disfrazado de valiente y arriesgado informador, defensor del derecho a la información, reunió a grandes expertos del mundo de la medicina entre los que se encontraban Terelu Campos y el Dr. Cabeza para sobrevolar, como buitres Leonados, la figura del tristemente fallecido Antonio Puerta.


Fue dramático ver cómo el programa removía de forma intencionada el triste suceso. Las insinuaciones no dejaron de oírse durante todo el programa. Había que conseguir como fuera recuperar las cifras de audiencia del programa que se emitía hasta hace poco en esa misma franja horaria: “Dolce Vita”. Con grandes dosis de morbo y una total falta de respeto por bandera emprendieron un viaje de casi cuatro horas en el que todo valió.


Enhorabuena por el 20.8% de cuota de pantalla. Y mi más sentido pésame por vuestra pérdida absoluta de dignidad.


Espero que el próximo sábado pidáis disculpas a los familiares y amigos de Antonio Puerta y que vuestra noria deje de dar vueltas sobre el mismo tema de una vez por todas.


Tranquilos, doy por supuesto que no lo vais a hacer.


¿SABER VIVIR?



En España vivimos aproximadamente 44 millones de personas. El último estudio del Instituto Nacional de Estadística revela que hay más de 6 millones de mayores, con una edad comprendida entre los 70 y los 90 años. La empresa de medición de audiencias SOFRES confirma que este numeroso grupo social consume televisión por un tubo ya que disponen de mucho tiempo libre.


TVE, entregados a la causa del servicio público, emite todas las mañanas “Saber Vivir”, un programa de salud que pretende guiar a nuestros mayores en lo que ellos consideran una vida saludable.


Es curioso lo que entienden algunos por una vida saludable. Hasta hace poco me encantaba ver a nuestros abuelos paseando por la calle en cuadrilla, charlando en los bancos, jugando a la petanca después del carajillo y dando la paliza a los obreros con precisas instrucciones sobre el manejo de grúas y otros instrumentos. Todos con su bolsita de plástico, su par de naranjas y su periódico gratuito bien guardadito.


Ayer me dirigía a la estación cuando empecé a observar que algo estaba cambiando. Me crucé con un par de señores de unos 65 años que casi me arrollan. Iban con cinta deportiva en el pelo y un cuenta pasos abrochado a la muñeca. Más adelante un abuelo comentaba a otro la importancia de beberse 200 ml de zumo de granada a las 12 en punto todos los días mientras el otro le contestaba indignado que eso ya no funcionaba. Al entrar en la estación vi a un señor que no paraba de levantarse y sentarse mientras se esforzaba en hacer algún tipo de ejercicio rectal que no me atrevo a describir. Imaginé que el programa de Torreiglesias debía haber acabado hacía diez minutos porque estaban todos como motos.


“Saber Vivir” es uno de los programas que más años consecutivos lleva en antena. Si Torreiglesias no se hubiera operado más de mil veces, estaríamos ante el primer presentador- arruga de la televisión. El éxito del programa responde a una ecuación muy simple. Una de las mayores preocupaciones de nuestros mayores es la salud. Si todos los días, de forma sistemática, TVE invita a la sugestión directa durante más de hora y media de programa, además de conseguir llenar de largas colas los centros de la Seguridad Social, irá creando un auténtico ejército de hipocondríacos consumidores de los productos que ellos mismos venden. Nos sorprendería comprobar la de gente que vive pendiente de su tensión, sus pulsaciones y su actimel de media mañana.


Hoy he consultado en el periódico el tema del día en “Saber Vivir”: “La vejiga, cuidados especiales para este invierno”. Os apuesto un carajillo a que dentro de dos semanas D. Manuel nos vende un calentador especial para la zona, y si no al tiempo.

¡Salud!.


Ficha técnica

- Programa 'Saber Vivir'.

- Se emite de lunes a viernes a las 11:30 en TVE.

- Presentado por Manuel Torreiglesias.

ODIO LOS MONÓLOGOS



Ayer fué un día muy duro. Cuando salí del trabajo, decidí ir a tomar algo con un amigo para aprovechar las pocas horas del día que nos suelen quedar a todos para dedicar a nuestra vida personal. A veces pienso que esto de la vida laboral lo inventó un cabronazo sin escrúpulos, sin familia, sin amigos y con muy poco sentido común. El caso es que como de costumbre, me adelanté y llegué antes de tiempo. Pedí una cerveza, cogí un periódico y me puse a ojear la programación de televisión para ver qué ponían “a la noche” (Lo siento, soy de Bilbao).


En la Sexta emitían “El Club de Flo” con unos invitados de excepción: La Juani, Terelu y Darek (El novio de la Obregón)… A la vez que leía esta interesantísima información, comencé a pasear lentamente por los cerros de Úbeda, intentando explicarme cómo alguien podía tener los santos cojones y la poca vergüenza de seguir apostando por un formato como el monólogo. Telecinco lo asesinó hace más de diez años y Canal Plus terminó incinerándolo años después. Pero da igual, parece que el payaso más VIP de la TV anda a sus anchas por la Sexta, calzando sus Converse rojas y empeñado en mantener este tipo de programa que curiosamente produce Globomedia (Su productora).


Cuando volví de Ubeda comprobé dos cosas: Mi amigo seguía sin llegar y justo al lado de mi mesa se había sentado un grupete de amigos con pinta de tener mucho tiempo libre a tomar unos cacharros. No dejaban de gritar. Competían a ver quién era el más gracioso. Todos intentaban meter cuchara pero nadie escuchaba a nadie. Al grupo se unió una persona más. Llegó con aires de intelectual moderno, calzaba unas desgastadas Converse azules y lucía una barba de tres días. Se sentó en el taburete más alto y todos sus amigos se centraron en él como esperando algo. Enseguida deduje que debía ser el graciosillo del grupo y que estaba a pocos segundos de soltar una gracia espectacular. Cuando el nuevo captó la atención de todos los allí reunidos, dijo:


- “Hay una cosa que no entiendo de los ascensores”.


Sobre la marcha tiré el periódico a la cara a ese aprendiz de monologuista, salí corriendo y al llegar a casa des-sintonicé la Sexta para siempre.


Mi amigo nunca llegó. Se le había complicado el día y seguía trabajando…


Socios del Club de Flo, el humor es un plato que se sirve caliente. La improvisación acabará imponiéndose a lo precocinado, previsible y aburrido. Poco a poco iréis cayendo y volveréis al lugar del que nunca debíais haber salido: el Teatro.


FICHA TÉCNICA

- El Club de Flo se emite la noche de los miércoles en la Sexta.

- Género: concurso / humor.

- Presentador: Florentino Fernández

- Colaboradores: Luisa Martín, Agustín Jiménez, Goyo Jiménez, Bermúdez.

- Duración: 120 min.

EL SHOW DEBE CONTINUAR



Son las 14:00 de la tarde. Salgo corriendo del trabajo para llegar cuanto antes a casa. Hoy no me lo puedo perder. Como lo más rápido que puedo mientras comienzo a sentir el mono cada vez más fuerte.


- “Advertimos de que las siguientes imágenes pueden herir su sensibilidad”.


- “No se pierdan detalle de lo que van a ver a continuación”.


Son las 14:30 de la tarde y todavía voy por el primer plato. El mono aprieta cada vez más fuerte. Mi corazón se acelera y rompo a sudar.


- “¿Creían que lo habían visto todo?”


- “Prepárense porque lo que van a ver les va a dejar con la boca abierta”


Por fin dan las 15:00 en punto. No he llegado al postre pero me da igual. Bajo las persianas, cierro las puertas y me siento a un metro escaso de la televisión.


¡Es la hora del informativo!


Comienzo a escuchar la sintonía bélica que acompaña al avance resumido de las noticias. ¡Algo fuerte ha tenido que pasar! No llego a salivar pero capta mi atención de una forma indescriptible y hace que mis pupilas se dilaten. ¡Ya noto la adrenalina! ¡Comienza el espectáculo!


******


Ya ha terminado. Me siento mucho mejor. Ya he consumido mi dosis de desgracia, crudeza y miseria de medio día. No descarto automedicarme y repetir la dosis de las 21:00. Además hoy estoy de suerte. Resulta que hay un señor que ha decidido quemarse vivo ante las cámaras y me lo han repetido 3 veces. Son tan atentos…


Es triste pero nos hemos enganchado. Nos han enganchado. Conocen nuestros apetitos, nuestras miserias. Es nuestra propia naturaleza humana. Y no van a dejar de alimentar nuestra desinformación y nuestros miedos ni un solo día.


¡Gracias por todo Matías, show must go on!


Antena 3 es líder indiscutible en informativos:

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EL MALTRATO HECHO CIRCO


Había oído hablar de Supermodelo 2007 como uno de los programas más ambiciosos dentro la parrilla de programación de cuatro. Desde que cuatro comenzó sus emisiones se ha caracterizado por emitir contenidos de gran calidad y se ha distinguido claramente del resto gracias a una imagen innovadora y a una forma de hacer televisión muy original y diferente al resto.
Ayer tuve que comprobar varias veces con el mando que lo que estaba viendo era un programa de la cadena nacional cuatro. No puedo entender como han sido capaces de apostar por un programa tan degradante para el público en general y para la mujer en particular. Aunque esto último que he dicho no es del todo cierto, ya que en este programa las protagonistas en su mayoría son niñas. El apartado más importante dentro del código de conducta de cualquier televisión es el de la protección de la infancia y de los menores. De verdad que ayer no me podía creer lo que estaba viendo. Gritos, insultos, humillaciones, maltrato emocional. Lo más triste de todo es que los maltratadores encargados de instruir a las menores son en su totalidad una pandilla de personajillos que acaban de estrenarse en el mundo de la televisión y que como puede comprobarse, levitan durante el programa pendientes de los resúmenes en los que salen como protagonistas machacando a las niñas mientras ponen caritas de satisfacción, orgullosos de su trabajo: "es lo mejor para ellas", "no saben lo que se van a encontrar cuando sean modelos de verdad", " es por su bien". "No tienen ni idea de como funciona este mundo" y esperan pacientes el comentario gracioso de la bufón del programa Vicky Berrocal, famosa en España por......... Es inevitable hacer una mención especial a la profesora más impresentable y endiosada de todas. No tengo ni idea de como se llama pero claramente es el peor bicho televisivo que he visto en mi vida. Como he comentado, desconozco su nombre, solo sé que es bizca y viste fatal. Es intolerable que esta mujer trate como trata a esas pobres. No entiendo como se permite que esa majadera afectada (con claros síntomas de persona desequilibrada) haga terapias psicológicas individuales a esas indefensas niñas. Es vergonzoso ver a esa mujer gritando y dando lecciones de vida. Tan superior... tan cursi... tan basta... Creo de verdad que es un programa que se debería eliminar de la parrilla de forma fulminante. No entiendo como cuatro ha decidido ensuciar su programación con este circo de maltratadores y maltratadas.